El hotel en si muy bién como siempre, el personal súper agradable, tanto en el bar como en la animación en especial Eli y Yoli. Tuvimos un problemilla con un socorrista joven, que en vez de trabajar se dedicaba a ligar con las niñas, haciendo caso omiso a los problemas de los demás huéspedes, cosa que trasladamos al personal de recepción, sin demasiado éxito. Poder coger una tumbona también era misión imposible, a las 8h de la mañana la gente ya se dedicaba a dejar las toallas en ellas, tardando horas en aparecer por la piscina, lamentable. El inconveniente más grande es que ahora está todo en obras y la zona de aparcamiento es zona verde o azul, a no ser que quieras caminar alrededor de 1km con la maletas a cuestas, el hotel debería tenerlo en cuenta ya que con lo que se paga de estancia, el parquing es muy caro. Como está todo en obras, para acceder a la playa hay un par de entradas, pero es engorroso e incómodo.
Estancia en el hotel: Junio 2025